Son padre e hija, cuyos restos reposan en el Santuario de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro en Granada, ciudad en la que ambos fallecieron.

La Santa Sede ha anunciado hoy miércoles 6 de mayo la autorización para que se promulgue el Decreto de Virtudes Heroicas de los Siervos de Dios Francisco Barrecheguren y Conchita Barrecheguren, padre e hija cuyos restos reposan en el Santuario de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, en Granada.

El anuncio se produce un día después de que el Papa recibiese en audiencia al Prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, cardenal Angelo Becciu, autorizando a esta Congregación a promulgar estos Decretos.

CONCHITA BARRECHEGUREN
La Sierva de Dios Conchita Barrecheguren García nació en Granada el 27 de noviembre de 1905. Su padre, Francisco Barrecheguren Montagut, es de Lérida y desciende de una familia vasco-catalana. Su madre, Concepción García Calvo, es granadina. La Causa de Beatificación y Canonización de Conchita, se inicia el 21 de septiembre de 1938, introducida por el Cardenal Parrado, Arzobispo de Granada, y se clausura, en su fase diocesana, el 7 de noviembre de 1945. El 9 de febrero de 1956, el Papa Pío XII aprobó el juicio sobre sus escritos y declaró que en ellos no existe cosa alguna que sea obstáculo, para proseguir su proceso de Beatificación y Canonización. Murió el 13 de mayo de 1927

FRANCISCO BARRECHEGUREN
El Siervo de Dios Francisco nació en Lérida el 21 de agosto de 1881 y murió en Granada el 7 de octubre de 1957. En 1937 quedó viudo de su esposa. Cuando cumplió 65 años entró como Postulante con los Misioneros Redentoristas de Granada y el 24 de agosto de 1947 hace su profesión religiosa en Nava del Rey, en Valladolid. Dos años después, el 25 de julio de 1949, será ordenado sacerdote en Madrid. Vuelve a Granada en el verano de 1949. Falleció el 7 de octubre de 1957.